La familia se reúne para hacer la oración: se
prepara la Biblia, el icono de la Sagrada Familia y una vela.
Empezamos
poniéndonos en presencia de Dios, y nos santiguamos: “EN EL NOMBRE DEL PADRE…”
INTRODUCCIÓN:
El Adviento es tiempo de:
-
espera-memoria
de la primera y humilde venida del
Salvador en nuestra carne mortal. Se nos invita a la conversión mediante la voz
de los profetas, y sobre todo de Juan Bautista:“Convertíos, porque está cerca
el reino de los cielos” (Mt 3,2)
-
espera-súplica
de la última y gloriosa venida de
Cristo, Señor de la historia y juez universal. El Día anhelado en cada
Eucaristía por el grito ¡Maran atá!, ¡ven
Señor!, en el que la promesa se convertirá en posesión, la fe en visión y
“nosotros seremos semejantes a él porque le veremos tal cual es” (1 Jn 3,2)